martes, 31 de julio de 2012

Un poema: Domingo en Santa Cristina de Budapest y frutería al lado, de Antonio Cisneros

Domingo en Santa Cristina de Budapest y frutería al lado

Llueve entre los duraznos y las peras,
las cáscaras brillantes bajo el río
como cascos romanos en sus jabas.
Llueve entre el ronquido de todas las resacas
y las grúas de hierro. El sacerdote
lleva el verde de Adviento y un micrófono.
Ignoro su lenguaje como ignoro
el siglo en que fundaron este templo.
Pero sé que el Señor está en su boca:
para mí las vihuelas, el más gordo becerro,
la túnica más rica, las sandalias,
porque estuve perdido
más que un grano de arena en Punta Negra,
más que el agua de lluvia entre las aguas
del Danubio revuelto.
Porque fui muerto y soy resucitado.
Llueve entre los duraznos y las peras,
frutas de estación cuyos nombres ignoro, pero sé
de su gusto y su aroma, su color
que cambia con los tiempos.
Ignoro las costumbres y el rostro del frutero
—su nombre es un cartel—
pero sé que estas fiestas y la cebada res
lo esperan al final del laberinto
como a todas las aves
cansadas de remar contra los vientos.
Porque fui muerto y soy resucitado,
Loado sea el nombre del Señor,
Sea el nombre que sea bajo esta lluvia buena.


De El Libro de Dios y de los húngaros (1978), en Comentarios reales, Pre-Textos, Madrid-Buenos Aires-Valencia 2003. ISBN: 84-8191-522-X.

sábado, 28 de julio de 2012

Checkpoint, de Nicholson Baker


Jay ha quedado con su viejo amigo Ben en una habitación de hotel, no lejos del Capitolio. Tiene algo importante que decirle, pero no sabe cómo empezar. «Evidentemente estás tramando algo» —dice Ben— «podrías empezar por ahí». «Vale —contesta Jay—. Esto… Voy a… De acuerdo, te lo voy a decir… Voy a asesinar al presidente». El presidente es, en aquel entonces, el segundo de los Bush. Y el diálogo entre los amigos, una continua crítica al sistema. Nicholson Baker (Rochester, Nueva York, 1956) ha sido calificado como el escritor más original de su generación, renovador de la narrativa norteamericana. No lo sé. En Checkpoint no he visto nada especial. No he leído más obras suyas, ni creo que las vaya a leer. Mucho menos después de navegar un rato por la red y leer algunos comentarios: hasta de «degenerado sexual», le llegan a calificar; aunque en la presente obra el tema del sexo ni se menciona.

sábado, 21 de julio de 2012

El jardín olvidado, de Kate Morton

Vísperas de la Primera Guerra Mundial. Una niña pelirroja es abandonada en un barco con destino a Australia.
La noche de su veintiún cumpleaños, Nell O’Connor descubre que es adoptada. Este hallazgo cambiará su vida para siempre y la conducirá a la ventosa costa de Cornualles.
A la muerte de Nell, su nieta Casandra recibe una inesperada herencia: una cabaña y su olvidado jardín —conocidos por los secretos que esconden— en tierras de Cornualles. Allí Casandra descubrirá finalmente la verdad sobre su familia y resolverá el misterio de la niña desaparecida.
El jardín olvidado, The Forgotten Garden, es una absorbente novela de misterio que te atrapa desde el principio. En palabras de María Dueñas, autora de El tiempo entre costuras: «Memorias, intriga y secretos de familia entretejidos en un absorbente laberinto de tramas complementarias que nos arrastran a una lectura llena de fuerza, ternura y emoción. Con un estilo ágil y envolvente, Kate Morton nos conmueve con una magnífica historia difícil de olvidar». Por lo que he podido comprobar, gusta especialmente al público femenino. A mí, la verdad, no me parece nada del otro mundo. No entiendo el bombo que se le está dando a esta autora.

sábado, 14 de julio de 2012

Interrogatorios, de Dashiell Hammett


Dashiell Hammett, inventor de lo que hoy conocemos como novela negra fue durante su vida un hombre comprometido con diversas causas: desde la lucha contra el nazismo, pasando por la exigencia del reconocimiento de los derechos civiles de los negros y los inmigrantes, hasta el reconocimiento de los derechos legales y electorales de los miembros del Partido Comunista en Estados Unidos. Por eso el propio Juez Mc Carthy dibujó una gran X sobre su rostro. En el ambiente de sospecha generalizada del inicio de la Guerra Fría y la «caza de brujas», Hammett fue convocado ante los tribunales en dos ocasiones y encerrado en un Penal Federal. En este pequeño volumen, por primera vez en castellano, se recogen las minutas de sus testimonios, que dan prueba de su ética personal y de la fidelidad a sus principios y a su libertad. El libro se cierra con el magnífico relato «Sombra en la noche», que aparece esgrimido en uno de los interrogatorios como posible prueba de su «talante anti-americano y subversivo». Para adictos a Hammet.