Ernest Hemingway publicó El viejo y el mar en 1952, primero en la revista Life y después como libro. Con él ganó en 1953 el Premio Pulitzer y al año siguiente el Nobel de literatura (1954). Tuvo un éxito inmediato y sigue siendo una de las obras más conocidas y apreciadas del novelista. Es la historia de un viejo pescador solo y solitario que atraviesa una mala racha. Sin embargo, no pierde la esperanza. Con mucho esfuerzo consigue atrapar un gran pez, pero antes de llegar a la playa con su gigantesca presa habrá de sostener una titánica lucha con el pez y el océano que le llevará a descubrir una extraña amistad, casi fraternidad, con el animal que combate. A pesar de las dificultades, el viejo conseguirá regresar victorioso, pues el triunfo consiste sobre todo en no dejarse vencer y él ha luchado hasta el final. Sabe que «el hombre no está hecho para la derrota. Un hombre puede ser destruido pero no derrotado». Este es el sentido de El viejo y el mar. Ha sido llevada al cine en varias ocasiones: En 1958, con Spencer Tracy como protagonista nominado al Oscar como mejor actor; en 1990, ocasión en que el protagonista es Anthony Quinn; y en 1999, como corto de Animación dirigido por Alexandr Petrov.
No hay comentarios:
Publicar un comentario